miércoles, 31 de marzo de 2010

En los susurros de una flor...


Bailan al ritmo de la penitencia, cargando en sus hombros la muerte de otro, y ojos admirados terminan siendo aplausos, o un guapa a pleno pulmón, o un arriba con ella que aunque es de materia muerta, merece la pena.
Málaga esta anegada de humo y clamor, me ciega y me ahoga, pero lo respeto aunque una señora casi me pone su bolso por sombrero por no verme tan emocionada como ella. Pienso que mi silencio ya es respeto porque yo también quiero gritar a pleno pulmón y salvar al mundo de virgenes y demonios, pero ni soy super woman, ni nadie me lo ha pedido.

Hoy entre una semana santa para unos y una contradictoria para otros,como yo, he ido alli donde estan las flores y me han contado un secreto inconfesable pero que todo el mundo sabe...

Respeto y admiro a todas aquellas personas que no dejan de creer, en lo que creen, aunque mi pelicula es en blanco y negro la mayoría de las ocasiones, hoy y no sé mañana, me lleno de otros colores. Porque en la diferecia esta la riqueza.

lunes, 22 de marzo de 2010

En el circo del desencanto...


Señoras y señores… ladies and gentleman, el circo de la desolación ha llegado a vuestros días, justo hoy, antes de ayer… acérquense sin miedo, pero con temor, pues estamos en la era del progreso al retroceso, e aquí el porque de nuestros días.
Para este circo solo hacen falta: humanoides , androides y miseraldoides , lo hemos conseguido, es increíble la fuerza débil del humano, donde ponemos el ojo, posteriormente hace falta un parche.
Pero ahora todo es aún más grave, esta mañana me cruce con una vecina de toda la vida, y quise comprobar si ya pertenecía al nuevo circo; un momento más tarde me arrepentí de saberlo. La gente esta cerca pero lejos, la gente no vive, sobrevive, la gente es desconfiada y competitiva. Mis trapecistas antes adoraban trabajar con el hombre de los leones y ahora los leones se las quieren comer; y el enano cariñoso y tenaz pelea contra la mujer cohete, hay rumores de ha incluso intentado, mandarla en el cohete a hacer puñetas.
Antes, cada viaje a una nueva ciudad ,era intrigante, fascinante, alarmante… antes la gente adoraba vernos en las carretera, admirados por el mundo circense; desde que todo es un circo, el de detrás sólo quiere ir delante, nos pita en un semáforo cuando la marcha se resiste a entrar.

Y que más da si no hay humanidad, tenemos móviles de última generación, y los niños ya no juegan a las canicas, o a los cromos, ahora es mucho mejor porque los niños son pensadores sin remedio, son los dioses y los padres los esclavos.
Todo tiene sentido, hacia falta un circo del desencanto para llegar a la era moderna y felicidades miseraldoides lo habéis conseguido. Los humanos cada vez somos menos humanos, ahora somos unos modernos miserables, matar una mujer es una noticia esperada, violar a tu compañera de viaje, es toda una hazaña; con suerte saldrás en portada después de la exclusiva de la estaban, que ella por su hija también, MA-TA.

Todo esta bien, podemos dormir tranquilos porque hacemos todo lo que podemos por ser honrados, y sobretodo buenas personas, aunque no hayamos conseguido humanizarnos.

Para aquellos que no quieran viajar con el nuevo circo del desencanto están invitados a mi nueva isla, la he buscado con cariño y esmero; en esta isla no habrá dinero, sólo trueques, en esta isla no habrá semáforos, ni coches, solo piernas. Y creedme que en esta isla, existirán los abrazos, también las personas que dan la gracias y los que piden por favor y aunque parezca imposible, habrá niños que serán sólo niños, jugaran en los árboles y con la arena en sus pies.

Bienvenidos todos aquellos humanos que quieran lo de ayer para ser felices hoy…

Pd: Escuchaba una canción de Dresdesn dolls mientras lo escribía, dejo el enlace, ya que lo suyo es leerlo y escuchar de forma simultanea la canción...

lunes, 15 de marzo de 2010

En mi cuerpo...


Secretos que cuentan a gritos verdades no escritas, pérdidas en cada sendero de la experiencia. Mundos en mapas de todos los colores, que no entienden de otra cosa que vivir. Y, en la capital del mapa, el juez redondo que no hace otra cosa que dar permiso a cada territorio para adquirir vida y sólo así mis manos son herramientas; sostenidas por unos hombros asustados, por no confiar en unas piernas cargadas de fuerza tímida, pero sincera, y en los países bajos los pies esperan la orden perfecta para iniciar el movimiento. Así viajo por la vida, con un sub- mundo lleno de poblados que intentan estar en paz, para así organizarse de una forma armónica y avanzar. Se acerca la rebelión provincial y trae de su mano la libertad...